Los momentos de euforia en las relaciones amorosas pueden estar seguidos de momentos de crisis. Seamos realistas, muchas veces el amor puede llegar a convertirse en el mayor causante de sufrimiento y de tristeza. Que tire la primera piedra quien no haya sufrido los efectos negativos del amor al menos una vez en su vida. Pues a todos esos valientes, sobrevivientes del desamor, debo decirles que no es menos cierto eso de que han tenido el corazón roto. Porque sí, existe el Síndrome del Corazón Roto.
¿Qué es exactamente? ¿Cómo se define?
De acuerdo con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el Síndrome del Corazón Roto es el nombre que se le da a la miocardiopatía por estrés, está relacionado con los efectos de la adrenalina durante situaciones que provocan mucho estrés o emociones muy intensas tales como una ruptura amorosa. Afecta solo a una parte del corazón (el ventrículo izquierdo) e interrumpe temporalmente la función habitual de bombeo de este. Las personas que presentan este síndrome suelen tener un dolor repentino en el pecho, falta de aire, desmayos, palpitaciones y, por esta sintomatología, llegar a pensar incluso que están teniendo un ataque cardíaco.
Ivaro Contreras Villaseñor, académico de la Facultad de Medicina de la UNAM, explicó que si bien la expresión “corazón roto” es muy conocida, como problema médico fue descrita apenas en los años 90 en Japón y afecta a alrededor de 5 mil personas en el mundo. Actualmente los casos han ido en aumento, pero lo que sorprende a muchos profesionales de la salud mental es que la afección impacta a las mujeres entre 50 y 74 años de 6 a 12 veces más que a los hombres, dato que se investiga y del cual se cree está asociado al final de la menopausia.
Hablando de amor, podemos asociar el Síndrome del Corazón Roto a casos de amor no correspondido, al descubrir una infidelidad, o al darnos cuenta de que esa persona por la cual sentíamos algo no es lo que creíamos. Pero, ¿cómo curar un corazón roto? Por supuesto, hay maneras de afrontar esta situación y la buena noticia es que un corazón roto puede evolucionar rápidamente y de forma favorable para el paciente.
Algunos tips son:
- Escribir sobre lo que sentimos, de esta forma exteriorizamos nuestras emociones y las dejamos volar.
- Pasar tiempo al aire libre.
- Hacer ejercicio como vía eficiente para liberar estrés.
- Aprender algo nuevo que mantenga nuestra mente ocupada por más tiempo.
- No tratar de aparentar con nuestros seres más allegados que todo está bien, y al contrario pasar tiempo con ellos y compartir tu dolor.
Son muchas las personas que llevan “la procesión por dentro” y hasta cierto punto el no abrirnos con nuestros seres más allegados, amigos e incluso con algún profesional, puede llevar a consecuencias de proporciones graves como el consumo de alcohol, drogas, un ritmo de vida poco saludable, etc., todo lo anterior para evadir la realidad. Lo peor de todo es que esto solo enmascara el dolor, no lo cura. La decisión más inteligente y adecuada que se puede tomar es enfrentar el dolor emocional (y sí, ya sé que no es cosa fácil). ¿Cómo hacerlo?
Pues si te cuidas, aceptas y abres la puerta a nuevos ciclos, cerrando los anteriores, el dolor inevitablemente se irá debilitando con los días. La resiliencia y aceptación de una situación negativa nos llena de herramientas para enfrentar situaciones que contribuirán a nuestro desarrollo personal.
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