El círculo de la vida

El círculo de la vida

Psicoanálisis

La vida vive en ella a veces. Otras no. Otras, ella la busca, creyendo que es otra cosa que aun no descubrió, se arroja a la búsqueda con el cuerpo a mano y se desparrama a la conquista del “acá”. Se entrega furiosa como buena hembra y tiene fe, porque siente en el cuerpo que es por ahí, no hay dudas.

Decide entregarse a esa experiencia y descubrir. Descubre. Se deja cubrir por otros nombres que surgen solo allí, en esa experiencia, adentro de ella, en ese húmedo vacío, en esa vuelta que da con suavidad, su mano, esa vuelta tan anhelada…y siente la novedad…la no-verdad que antes cree haber habitado…vivió engañada se pregunta….y se siente iluminada por un rato como nunca.

Ella vuelve a vivir, pero esta vez será diferente, dice. Ahora realmente descubrió su nombre. Esta vez sí. Pero rápidamente advierte que su nombre no es más que uno entre otros. Y entristeció súbitamente, porque esa abierta, cubierta nueva de su mundo es también pantalla, tan veraz y tan engañosa como antes.

Todo va y vuelve, sintió. Todo va y vuelve en un tiempo no lineal. No hay progreso, lo sintió en su piel y se le atascó el silencio en su garganta. Y en el pecho una roca, dura…durísima señalizaba el dolor. Se dice de otro modo ahora, más sensato, más real, ella cree. Ella intenta crear en ese artificio una momentánea eternidad. Instantáneas eternidades soportes de un real que no calla. Cae la ilusión de un tiempo sin sacudidas hecho de hallazgos ciertos que calmen la sed. Ella busca, aún. Tal vez advierta que en el amor y en el deseo el reloj sigue injertando incertidumbre, que hay ritmos imparables que si se paran se vuelven a caer, que caen y siguen doliendo, que el amor no resguarda. Que el ser sigue guardando un enigma, que solo advierte la cifra al descifrarlo, y la cifra es indecible. Se cifra lo indecible del río en una…y ella ya no es represa sino fuente de su producción. Nada más que acto. Y se desespera de que lo esperado no fuera más que una cifra que encima no puede decir.

Los otros preguntaran por su retiro, su viaje a los orígenes de su alfabetización. Le preguntarán por sus lágrimas y sus silencios. Ella sonreirá porque entendió lo que no podrá contar. Entonces…cómo hará ahora con los otros, se preguntó. Y siguió.

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Licenciada en Psicología

Psicoanalista. Miembro de la Escuela Freudiana de Buenos Aires. Imparte seminarios en nombre propio. Escribe poesía y prosa poética. Autora del libro “Conjugadas” [...]