Qué cierto es que el afecto, es el efecto de las palabras
Las espero y repentinamente una viene, de quién sabe dónde, con toda la potencia de donde salió, del vacío que la engendró y su potencia me destierra y me exilia de un silencio que a veces es mucho, que no se abriría si ella no fuera su llave. Ahí lo descubro. Amo las palabras llave. [...]