Dr. Jorge Mañach Robato: el mejor biógrafo de José Martí

Manach

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El Lic. Yanquiel Barrios Hernández, editor del blog www.sicologiasinp.com, con la gentileza  que lo identifica en el medio profesional y fuera de él, me ha pedido que escriba sobre el doctor Jorge Mañach Robato (Sagua la Grande, 1898 – San Juan de Puerto Rico, 1961), una de las personalidadesemblemáticas de la cultura cubana e iberoamericana, y al mismo tiempo, más controversiales del siglo veinte tropical.

El doctor Mañach Robato era un escritor, periodista, ensayista y pensador villareño de primera línea, autor de una biografía de José Martí, que conservo como una preciada joya bibliográfica, y una de las mejores que han visto la luz de la publicidad, segúnel criterio sustentado por los estudiosos de la vida y la obra del fundador del periódico Patria, y del ensayo Indagación del choteo, aporte sociolingüístico realizado por el ilustre intelectual al conocimiento de la personalidad básica de ese mestizo único e irrepetible que vive, ama, crea y sueña en la mayor isla de las Antillas.

Desde la infancia, la formación político-ideológica de Mañach recibió la influencia reaccionaria de los progenitores, quienes fueron contrarios a la independencia de Cuba, y quizás influidos por los giros que adquirieron los acontecimientos históricos en el momento en que el pequeño vástago vio los rayos del Astro Rey, abandonaron la ínsula caribeña y viajaron con destino a la península ibérica, de donde retornaron —en 1913— a la patria que vio nacer y crecer intelectual, humana y espiritualmente al primogénito, convertido ya en un adolescente.

Al fallecer el padre, Jorge marchó a Estados Unidos, donde obtuvo el doctorado en Filosofía y Letras por la Universidad de Harvard (1920), una de las más prestigiosas de la vecina nación norteña, y donde ejerció la docencia superior como instructor graduado (1921). Con posterioridad, se trasladó a París, la «Ciudad Luz», donde estudió en la Universidad de Droit (1922). Por último, regresó a La Habana, donde en la capitalina Alma Mater se graduó de doctor en Derecho Civil (1924), y en 1928, de doctor en Filosofía y Letras

En diciembre de 1932, fundó el espacio radial La Universidad del Aire; programa pionero en Hispanoamérica en utilizar los medios masivos de comunicación en la difusión de la cultura cubana y universal.

Desde 1940, fue el primer profesor titular de Historia de la Filosofía en nuestra Casa de Altos Estudios, donde se caracterizó por una comprometidaparticipación en la vida política de la época socio-histórica que le tocó vivir, y al mismo tiempo, por suacendrado compromiso con el desarrollo y divulgación de los principios éticos, estéticos, culturales, históricos, humanos y espirituales en que se estructura la nación cubana

Entre 1946 y 1956, impartió cursos de literatura hispanoamericana en la Universidad Católica Santo Tomás de Villanueva, que desapareció del contexto académico nacional en 1961, como consecuencia de la Ley de Nacionalización de la Enseñanza, promulgada por el Gobierno Revolucionario.

Mañach fue un periodista que, al decir martiano, «apuntó bien y dio en el blanco», colaboró con los más disímiles medios de comunicación (diarios,  revistas, radio y televisión). Fue uno de los mejoresprosistas del período republicano, y cultivó la amistad de los doctores Rubén Martínez Villena (1899-1934), Raúl Roa García (1907-1982) y Juan Marinello Vidaurreta (1898-1977), de quienes se separó como consecuencia de las ideas izquierdistas que defendían con razón y emoción; en consecuencia, estableció ardientes polémicas con los insignes intelectuales revolucionarios.

Integró el equipo de editores de la Revista de Avance (1927-1930), órgano principal de la vanguardia literaria y artística en Cuba, que dejó de publicarse por la represión del gobierno del general Gerardo Machado y Morales (1871-1939). Miembro activo de la Academia Nacional de Artes y Letras, de la Real Academia Española de la Lengua y de la Academia de la Historia de Cuba.

No obstante las primeras influencias anti-independentistas que descubriera en quienes le dieron el ser, Jorge Mañach fue miembro activo del Grupo Minorista integrado por jóvenes intelectuales y cuando todavía era un adolescente participó en la que sería su primera actividad política: la Protesta de los 13, contra la corrupción administrativa prevaleciente en el (des) gobierno del doctor Alfredo Zayas y Alfonso (1861-1934). Intervino activamente en la revolución de 1933 contra la dictadura machadista, y después del artero golpe de estado del 10 de marzo de 1952, se opuso al gobierno de facto del general Fulgencio Batista y Zaldívar (1901-1973); motivo por el cual tuvo que emigrar a España.

En 1959, con la alborada revolucionaria, regresó a nuestro archipiélago. En 1960, integró el jurado del primer Concurso Literario Casa de las Américas, y en septiembre de ese mismo año, se acogió a la jubilación como docente universitario.

Después, abadonaría definitivamente a Cuba por dos razones que los investigadores estudiosos ehistoriadores no han podido dilucidar con exactitud: los extremistas refieren que estaba inconforme conlos principios de la Revolución, y los más consecuentes defienden el criterio de que, como toda su familia se iba del país, y ya Mañach se encontraba viejo y enfermo, no quiso o no pudo quedarse solo (como sí lo hizo este articulista), para enfrentar el desarrollo de los radicales cambios socioeconómicos y políticos que traía implícitos el triunfo de una revolución verdadera.

Acerca de esos dos grandes ejes temáticos gira el secreto de por qué el distinguido profesor de nuestro máximo centro de educación superior fue a terminar sus días en el ala borinqueña del colibrí martiano; fusión de dos frases: una de doña Lola Rodríguez de Tío (1843-1924); y otra de Martí, ese «gran secreto que nos acompaña», al decir de José Lezama Lima(1910-1976).

Antes de finalizar, me agradaría destacar que el doctor Mañach Robato era un eminente intelectual, independientemente de las razones que lo llevaron a irse de Cuba, y para sustentar ese criterio me hebasado —principalmente— en dos de sus obras antológicas:

Martí, el Apóstol, en la que —desde una óptica objetivo-subjetiva por excelencia— no solo hace un recorrido in extenso por la existencia terrenal y la vida y la obra patriótica, poético-literaria y periodística del más universal de los cubanos, sino también explora —con gran sagacidad psicológica—la incomprensión de que el poeta mayor de la patria grande latinoamericana fuera objeto por parte de los seres más queridos para él, y de los compañeros de armas e ideales independentistas y antiimperialistas(altos oficiales del Ejército Libertador que, al igual que Martí, luchaban contra la dominación colonialhispana y el yugo que Estados Unidos pretendía imponerle a la futura República); y por otra parte,explica los fundamentos personográficos esencialesque identifican al Héroe de Dos Ríos: el amor y el perdón, devenidos leitmotiv en la doctrina martiana

Su otro valiosísimo aporte al conocimiento psicológico del cubano es su Indagación del choteo; texto de palpitante actualidad y absoluta vigencia,en el que investiga una de las características fundamentales de la forma sui generis de ser de los insulares que nos identifican en cualquier circunstancia adversa u hostil que enfrentemos, y que sirve de mecanismo de defensa para paliar las tormentas socio-económicas y políticas que hemos afrontado, afrontamos y debemos continuar afrontando desde que Cuba rompió el vínculo filialcon la metrópoli y dejó de ser el patio trasero de nuestros vecinos del norte

Según los hallazgos de dicha pesquisa sociolingüística llevada a cabo por el doctor Jorge Mañach Robato, el cubano se burla de los demás, de todo lo que le rodea, y hasta de sí mismo, para escapar de los grandes obstáculos que Madre Natura le coloca delante para que resbale y caiga…, pero esa capacidad de resiliencia que nos obliga a levantarnos cada vez que resbalamos y caemos,está respaldada — ¿quién lo duda?— por esa fuerza ignota que Mañach calificara con el mítico nombre de choteo, y que el sabio, don Fernando Ortiz (1881-1969), incorporara como uno de los ingredientes básicos indispensables que condimentan el ajiaco multi-étnico-cultural que somos los cubanos: seres únicos e irrepetibles.

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SicologiaSinP.com - Jesús Dueñas

Doctor en Pedagogía

Maestro Normalista y Doctor en Pedagogía. Profesor de Metodología de la Investigación. Dedicado a la docencia médica de pre y posgrado, así como a la enseñanza del Psicodiagnóstico Rorschach y a la investigación clínica con apoyo en los hallazgos de ese método de investigación de la personalidad, científica y artísticamente diseñado por el genial psiquiatra suizo Hermann Rorschach. Es Socio Honorario de la Scuola Romana Rorschach y miembro fundador de la Sociedad Cubana de Rorschach, miembro de la Asociación Internacional de Psicogeriatría, con sede en Illionis, Estados Unidos, miembro ttitular de la Sociedad Cubana de Psicología de la Salud y numerario de la Sociedad Cubana de Psicología y de la Asociación de Pedagogos de Cuba. Dedicado a la crítica artístico-literaria y el periodismo cultural en varios medios nacionales de prensa. Es miembro del Consejo Internacional de la Danza (CID-UNESCO), de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), de la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC) y de la Comisión de Prensa de la Asociación Cubana de Naciones Unidas. Autor de los libros "La danza vista por un psicólogo" y "La danza vista por un crítico teatral". [...]