El Psiquiatra ya no es el alienista del siglo XVII. Entrevista al Dr. Pérez Milán

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Entrevistas

Agradecemos al Dr. José Francisco Pérez Milán por aceptar nuestra convocatoria a este  espacio. Desde 1985 se desempeña como especialista en el departamento de Psiquiatría Forense del Hospital Psiquiátrico de La Habana. El Dr. Pérez Milán es Máster en Farmacología y Profesor Asistente de Psiquiatría en la Facultad “Calixto García” de la Universidad de Ciencias Médicas de La Habana. Además es miembro del Consejo Científico del Hospital Psiquiátrico de La Habana y Presidente del Colegio Cubano, Vocal del Colegio Lartinoamericano y miembro del Colegio Internacional de Neuropsicofarmacología.

Ha estado al frente de diferentes líneas investigativas en el campo de la Psiquiatría Biológica, dentro de las que sobresalen:” Efectos de precursores dopaminérgicos en síntomas negativos esquizofrénicos”, “Estudios de elementos trazas en pacientes con psicopatología variada”, “Neuroimagenología y Neurobioquímica en pacientes esquizofrénicos portadores de síntomas negativos”, “Aplicación del Interferón alfa-2b recombinante humano en el tratamiento de la esquizofrenia paranoide”, “Aspectos Biológicos de la conducta violenta”, entre otras.

Entrevista al Dr. Pérez Milán

¿Cuál fue la motivación que lo llevó a especializarse en psiquiatría?

En mi época de adolescente existía un mito con la psiquiatría y la psicología en relación al conocimiento que tenían esas dos ciencias acerca de la mente y conducta humana, en momentos de más desconocimiento que los actuales. Por ahi comenzó la motivación que como toda  manifestación psicológica es también multifactorial y desde que aparece la tendencia hasta que logres tu objetivo, en este caso la especialización, suceden muchos eventos que pueden reforzar o debilitar esa inicial motivación. En mi caso fue reforzándose con las películas que trataban el tema hasta las lecturas pseudocentíficas y best seller del tema que caían en mis manos completándose al descubrir que esa especialidad de la medicina no era solo la elegante consulta del psicoanalista sino también la del hospital de enajenados que popularmente se temía y se rechazaba.  Fue justamente eso, la voluntad y hasta la compasión de acercarme y ayudar a personas excluídas socialmente en su mayoría por sufrir una enfermedad mental, que obró como incentivo, completó y me mantuvo fiel al desarrollo de mi motivación.

¿Qué padecimientos son los que más trata, cuál es su línea de investigación fundamental?

Dentro de mi formación,  la vida me fue llevando por un recorrido vinculado siempre con pacientes portadores de enfermedades y síntomas de nivel psicótico y desde mi servicio social, que realicé trabajando y entrenándome en un Hospital Psiquiátrico de Santiago de Cuba y después, como residente y especialista graduado en el Hospital Psiquiátrico de La Habana, he ejercido la mayor parte de mi vida profesional vinculado a esa variedad de trastornos psiquiátricos y me gratifica ver desde la mejoría, aunque mínima de cualquier cuadro sintomático hasta la aparente curación de un enfermo,  que no depende tanto de factores biológicos o psicológicos sino la vertiente social que se escapa de nuestro control y muchas veces influye hasta impedir la total recuperación, a pesar de nuestras posibilidades y dedicación .

Entiéndase por sintomas psicóticos aquellos que cambian la personalidad y desorganizan el comportamiento de un sujeto de manera significativa que le impida su adaptación y desarrollo al medio social en que se desenvuelven, debido a los síntomas, casi incomprensibles para un sujeto normal,  de los cuales el sujeto no tienen crítica ni interés por cambiarlos.

Basado en la respuesta anterior de los padecimientos que con mayor frecuencia le llegan a consulta, pudiera responder sobre las posibles causas para que esto ocurra así.

El contexto de la respuesta no se ajustará con exactitud a la pregunta porque las personas con trastornos psicóticos, en el caso de mi respuesta,  por lo general no “llegan a consulta” sino que son llevados por terceros (familiares, amigos, incluso por la policía) de manera involuntaria o son remitidos a los cuerpos de guardias de la especialidad ya que los pacientes que funcionan en ese nivel psicológico no tienen crítica de su padecimiento y la mayoría de las veces se resisten a visitar a un facultativo porque no se consideran enfermos.

La causa de una enfermedad psicótica como la esquizofrenia o el trastorno bipolar por citar dos de las más conocidas, es multifactorial dependiendo en algunas más que en otras de factores psicológicos o sociales y en otras se sospecha con algún peso mayor la presencia de factores biológicos. En algunas condiciones donde es evidente el daño cerebral, funcional o morfológico, como en los traumas craneales de cierta magnitud, algunas epilepsias, puede aparecer una sintmatología de ese nivel psicótico como consecuencia de esa alteración morfológica o funcional del cerebro. También la sintomatología psicótica puede aparecer  secundariamente en algunas enfermedades sistémicas, como por ejemplo en estados avanzados de insuficiencias hepáticas y renales y ante la intoxicaciones por sustancias como el alcohol y las drogas, sobre todo esta última causa. Las intoxicaciones por abuso y mal uso de sustancias adictivas y distorcionadoras de la consciencia, proporcionan a la estadística cuadros del nivel psicóticos transitorios y otras veces desencadenan enfermedades psiquiátricas de evolución prolongada y estas causas de trastornos psicóticos, sobre todo la producida por drogas, se están observando con alta incidencia en casi todo el mundo. Cuba no es la excepción, pero en este minuto no esta dentro de los países de más alta prevalencia. Esta situación debería ser una alarma para los promotores de la legalización del consumo drogas que si bien y teóricamente acabaría con el narcotráfico y la violencia que este fenómeno trae consigo, empeoraría el cuadro sanitario de los trastonso y enfermedades mentales cuya casusa es el abuso y mal uso de drogas .

¿Está de acuerdo con la interdisciplinariedad para el tratamiento de cualquier padecimiento psiquiátrico? En este caso me refiero al papel que puede jugar la psicología dentro del proceso de rehabilitación y post rehabilitación.

Por supuesto. El mundo científico actual es multidisciplinario, nadie puede hacer en solitario una labor profesional o investigativa seria y profunda, soslayando el saber compartido y la comprensión integradora,  como cuando se reflexiona sobre un fenómeno desde diferentes fuentes del conocimiento.  Esto es válido para todos los eventos de este tiempo, pero lo es aún más para las ciencias en general, sobre todo para las neurociencias donde nuestra especialidad y la psicología son parte integrante de ese equipo de trabajo.  La psicología y la psiquiatría son dos ciencias que se complementan y estan llamadas a unirse más en el futuro. En todo abordaje terapéutico de algún trastorno psiquiátrico ya sea de enfermedades psiquiátricas, de tratamiento a las adicciones, de trastornos del neurodesarrollo que debuntan en la infancia, de afecciones psicosoma´ticas producidas popr stress, el psicólogo es cooterapéuta junto al psiquiatra y a otros miembros técnicos y profesionales que pueden varíar según el objetivo terapéutico con el paciente, pero el psiólogo nunca debe de faltar.

Salvador Gonzales Pal (neurólogo), Pérez Milán (psiquiatra) y Ricardo Gonzales Menéndez (psiquiatra)

Salvador Gonzales Pal (neurólogo), Pérez Milán (psiquiatra) y Ricardo Gonzales Menéndez (psiquiatra)

 

¿Cómo ve la salud de la psiquiatría cubana? Aciertos, desaciertos y desafíos.

Aciertos y desaciertos no son temas para comentar en breves líneas porque ambos forman parte de la historia de algún fenómeno humano y su crónica no es productiva desde opiniones individuales como recreo del tema. La psiquiatría cubana esta en un momento transicional en que nos va dejando una generación de profesores legendarios que dieron su aporte y trascendieron internacionalmente, de los cuales aún se mantienen algunos en la docencia e investigación. Ellos nos pasan el legado a la generación a que pertenezco, encargada ahora de organizar, enseñar y estimular la investigación. Por citar ejemplos de esa continuidad, se implementó recientemente un nuevo programa de la especialización que actualiza y adiciona contenidos y pasantías por otras especialidades, imprescindibles y complementarias para un educando en formación. La investigación no se ha detenido, desviando atención hacia los aspectos clínicos de la especialidad por la carencia de recursos y tecnología en función de la investigación que desde hace más de una década padecemos. La generación de nuevos especialistas que nos sucederá, conformada es en su mayoría de personas muy jóvenes, pero inteligentes y talentosas en su mayoría, a los cuales estamos encargados de transmitirle todo lo necesario para que sostengan sobre sus hombros el balance de aciertos logrado que se expresaría fundamentalmente en la atención eficiente al ciudadano que sufre de un trastornos mental en cualquiera de sus variantes y para mí es el acierto más importante y meritorio que se ha logrado en los últimos años. También hay desaciertos, la mayoría dependendientes de lo administrativo y logístico por lo que su superación muchas veces es ajena a nuestro alcance inmediato. Eso nos ha detenido en el desarrollo científico que logramos hasta la primera década del presente siglo en el campo biológico. No obstante mantener la atención capacitada y dispuesta al usuatio demandante de atención a la salud mental es el mejor exponente de los pocos o muchos aciertos logrados.

¿Qué le parece el estigma que existe alrededor del hecho de que quien va al psiquiatra    es porque esta ´´loco´´?

Por suerte ese estigma va desapareciendo, casi se ha extinguido porque el psiquiatra ya no es el alienista del siglo XVII que protagonizaba el tratamiento en un manicomio. Esa imagen trascendió deformada hasta casi el final del pasado siglo y ese tabu social evitó que muchas personas encontraran ayuda en la especialidad. Desde hace décadas el psiquiatra es también el psicoterapéuta y hasta coach de muchas personas que aceptan y buscan consejo y terapéutica especializada para superar desde un trastorno restrictivo  hasta un leve síntoma que les ocasiona alguna limitación social y quieren controlar o mejorar para funcionar mejor,  al igual que otras personas que acuden desinhibidas al cirujano plástico para restablecer cambios de la edad o corregir alguna inconformidad estética y vivir con más satisfacción.

Alguna recomendación a la nueva hornada de psiquiatras y psicólogos que se dedican al tratamiento de las adicciones.

Que sigan como van. Lo decía anteriormente. La nueva generación de especialistas jóvenes, que tiene en su mano importantes oportunidades asistenciales, investigativas y docentes,  asume con entusiasmo y seriedad el legado de nuestos profesores y en el campo de las adicciones, desde la atención primaria hasta la terciaria, pasando por las salas de tratamiento para la deshabituación. Me impresiona con admiración, el interés y  profesionalidad con que los nuevos y jóvenes especialistas, psiólogos y psiquiatras que conforman el equipo de abordaje a las adicciones, han enfrentado el reto.

Para usted existe alguna diferencia en escribir psicología con P o sin P

Me sigue gustando con P y no es que quiera facilitar la semántica establecida, pero tradicionalmente esta palabra, contradictoria en pronunciación para el castellano,  es quien ha identificado esta ciencia que se ha desarrollado como materia pero no ha cambiado en estilo, campo y objetivos por lo que     quitarle la P a ese símbolo no tiene mucho sentido práctico y pudiera hasta descaracterizar su identidad

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